La vida en tándem: pedalear de a dos

Un padre que pedalea con su hijo autista, que ya han cruzado los Andes y que en 2021 harán el Camino de Santiago. Un marplatense que para animar a su amigo a andar en bici lo llevó en tándem a hacer una salida cicloturística. Y la experiencia de Tiflotándem, organizada para personas con discapacidad visual y voluntarios guía. Tres casos de las maravillas que ofrece la bicicleta para dos.

Empujando límites

Antes de decirme que mi hijo Santiago tenía autismo me dijeron que tenía hipotonía muscular y lo primero que pensé fue: ¡Hay que entrenar! Le compré un triciclo de ruedas anchas y nunca más quizo dejar de pedalear.
A los 7 años le prometí que si aprendía a andar en bicicleta solo, cuando cumpliera 15 iríamos a cruzar la Cordillera de los Andes. Santi se largó solo, pero había un pequeño detalle, no le interesaba frenar. Entonces surgió la idea del tándem, una bicicleta de a dos.
En marzo del 2017 compramos nuestro tándem y entrenamos muy duro. El 11 de marzo de 2019, dos días antes de que Santi cumpliese 16 años, llegamos al Océano Pacífico desde San Martín de los Andes, cumpliendo así con la promesa.
Ya pedaleamos más de 9.000 kilómetros, en los cuales aprendimos que lo importante está en el camino y no en llegar.
Corremos carreras a lo largo y ancho del país, corrimos el medio ironman de Nordelta y tenemos muchísimos desafíos por delante.
Vivimos la vida al aire libre y haciendo deporte. Nuestra historia gusta tanto que tenemos 36.000 seguidores en Instagram y 14.000 en Facebook. Nos hacemos llamar Empujando Límites, que es la actitud con la cual vivimos el día a día.
Actualmente, viendo que haciendo lo que nos gusta inspiramos a tanta gente, estamos armando la asociación sin fines de lucro Empujando Límites (en trámite en la Inspección General de Justicia), con la idea de poner un tándem en cada pueblo de Latinoamérica, para que personas con cualquier discapacidad puedan hacer sus terapias en tándem y las familias, al ver que ellos pueden, lo adopten como forma de vida.
Ademas de los proyectos deportivos y sociales tenemos uno cultural. Estamos trabajando en el largometraje documental del Cruce de los Andes.
Nuestro próximo gran desafío cicloviajero va a ser el 2 de abril de 2021, Día Mundial de Concientización del Autismo, desafío que se llamará Santiago a Santiago y que consistirá en hacer el camino de Santiago de Compostela.

Por Juan Zemborain: juan@empujandolimites.com | www.empujandolimites.com



Salida gourmet en tándem

Los tándems siempre cautivaron la imaginación de los ciclistas. Aparecidos en la última década del siglo 19, se atribuye su invención al danés Mikael Pedersen. Marcas como Humber, Singer, Rudge, Raleigh, Whitworth y Chater Lea fueron precursoras en la construcción y perfeccionamiento tecnológico de estos vehículos biplaza. Ya desde sus comienzos fueron muy aceptados por el público, especialmente por parejas, familias o amigos, como quedó demostrado en la posguerra o en distintos tiempos de crisis en el mundo entero, donde el grupo familiar completo, incluso con carga, surcaban los caminos hacia destinos de esparcimiento o en la movilización cotidiana.
Sin ser entonces una excepción y dando rienda suelta a mi imaginación de ciclista armé un tándem con un cuadro de fabricación nacional y para estrenarlo invité a un amigo que no sabe andar en bici, un poco para que descubriera y disfrutara del cicloturismo, aunque también para motivarlo a que aprendiese y fuera autónomo en sus desplazamientos cotidianos.
La propuesta fue hacer una salida recorriendo parte de la ruta provincial 226, desde el centro de Mar del Plata al Barrio Santa Paula, ingresando por los caminos de las quintas con destino al arroyo Los Ortices, a escasos kilómetros de la Laguna de Los Padres, donde almorzaríamos unos ravioles con tuco de pollo, un menú no muy dietético pero sí delicioso. Era domingo, y por tradición, para muchos, es el día de las pastas.
La noche anterior herví dos pata-muslo de pollo, que serían desmemuzadas, siendo parte del contenido del tuco, que cocinamos ya en el lugar de destino, utilizando para ello un pequeño disco, hecho artesanalmente con un sartén, y una olla donde hervimos los ravioles.
Como el día estaba muy caluroso, ya que en el momento de esta tan particular salida transcurría el mes de febrero, entre preparación y cocción nos turnamos para refrescarnos en el arroyo.
Llegado el momento de emprender el regreso, nos esperaba un trayecto por caminos internos que nos llevarían a la Ciudad de Batán, en donde tomaríamos unos reconfortantes helados para darle el toque final a una salida maravillosa, compartida con un buen amigo y totalmente satisfechos por el comportamiento del tándem, más teniendo en cuenta la inexperiencia del copiloto y la carga que llevábamos.
Hicimos el recorrido sin inconveniente alguno, demostrando nuevamente que con un vehículo impulsado por nuestra propia energía se puede tener acceso a lugares distantes, sin contaminación alguna, economizando recursos y beneficiando nuestra salud.

Por Juan Miguel Lipicer: guía de salidas recreativas | (0223)5190959



Tiflotándem

Sabemos que el ciclismo es una forma de unión para quienes lo practicamos día a día. Este factor de unión y mutua colaboración se potencia cuando es inclusivo, en este caso dirigido particularmente a personas con discapacidad visual y a voluntarios guía.
Desde 2016 la Asociación Civil Tiflonexos desarrolla el proyecto Tiflotándem. Se trata de un grupo de ciclismo adaptado donde personas ciegas y con baja visión hacen este deporte en tándem junto a voluntarios acompañantes.
Lejos del asistencialismo, todos van a la par, ciclistas con discapacidad visual y voluntarios. De otro modo, las tándem no andarían y el proyecto tampoco.
Tiflonexos surgió en 2001 como organización que lleva adelante la biblioteca digital Tiflolibros, primera en América Latina para personas con discapacidad visual. Aclaremos que Tiflo es un prefijo griego que se utiliza para referirnos a todo lo relacionado con la discapacidad visual: según la mitología, Tiflos era una isla donde las personas ciegas vivían a su propia suerte, de ahí que hablemos de tiflología y, en este caso, de Tiflonexos. Esta biblioteca hoy tiene cerca de 60.000 libros a los que acceden personas con discapacidad visual de distintas partes del mundo y lo hacen a través de software con voz sintética instalados en computadoras, celulares y otros dispositivos digitales.
Con el tiempo las actividades se fueron diversificando y a la biblioteca digital se le sumaron proyectos presenciales, entre ellos el del deporte adaptado.
Hoy el grupo de Tiflotandem está conformado por más de 30 personas, entre ciclistas con discapacidad visual y voluntarios, coordinados por el preparador físico Alan Niestroj. El ciclismo adaptado es una disciplina paralímpica. Por ahora este grupo lo hace con fines recreativos, pero quien quiera desarrollarlo a nivel profesional también tiene la posibilidad. Antes de las cuarentenas, practicaban los sábados por la mañana en el circuito KDT de Buenos Aires y, ni bien sea posible, buscan ampliar el proyecto con la inclusión de más personas y recursos.
La forma de extender este tipo de iniciativas solidarias es contar con más bicicletas tándem y más voluntarios que deseen participar, con el apoyo del estado y de particulares, entre ellos los fabricantes e importadores de bicicletas, repuestos y accesorios y las bicicleterías. Uno de los objetivos consiste en que el ciclismo adaptado también esté presente en los espacios públicos, para que, así como un ciclista que ve puede llevarse una bicicleta y devolverla en distintos puntos de la ciudad, el estado también garantice que lo mismo puedan hacer los ciclistas ciegos o con baja visión acompañados por familiares, amigos o voluntarios.
La inclusión es una palabra que de a poco va entrando en nuestro vocabulario común. Para que sea una realidad efectiva es vital tomar conciencia de que la discapacidad no reside en un déficit físico o cognitivo. Por supuesto que las limitaciones existen, pero lo más importante no son ellas en sí mismas sino las barreras edilicias y comunicacionales y las actitudes de origen social que limitan la participación en la vida cotidiana.
Lo que hace que muchas personas con discapacidad no practiquen deporte no son sus deficiencias sino la falta de circuitos accesibles y de recursos para lograrlo. Todos desde nuestro lugar podemos hacer algo para aportar a este proyecto solidario.

Por Guillermina Fernández: lfernandez@maruba.com.ar | voluntariado@tiflonexos.org / tiflonexos.org


Nodari
Dónde conseguir una tándem

Algunas de las bicis tándem que hay en Argentina son importadas por marcas internacionales de primera línea, aunque son escasas. Otras han sido armadas en el país a partir de cuadros artesanales. Precisamente, la bicicletería porteña Nodari, ubicada en Parque Centenario, acumula una extensa experiencia en el armado de bicicletas tándem y dispone de algunos cuadros para ese destino. Si el tándem es lo tuyo, no dejes de asesorarte con él.

www.nodari.com.ar