La triatleta internacional cordobesa Romina Biagioli, una deportista con grandes objetivos, ha recibido recientemente el apoyo de la marca Cervelo. Con ella hablamos de su actualidad y sus metas olímpicas, luego de un 2021 incierto para todos.
“El 2021 arrancó incierto por lo que hace a la clasificación olímpica. Si quedaba como estaba (qué era una opción) yo ya estaba adentro. Si continuaba, se trataba simplemente mantener los resultados. Teníamos cuatro fechas para cerrar. Una de ellas era Yokohama, que a último momento no pude hacer, porque los vuelos no me lo permitían y estaba todo tan estricto con lo de la burbuja que de la organización no aceptaron que llegara un día después.
Por ende me quedaron tres fechas.
La primera en Portugal, donde hubo una caída en el pelotón que me provocó fractura y rotación de algunas costillas. Decidí entonces hacer la fecha de Italia, seis días después, pero aún no me habían recetado ningún medicamento y el dolor fue bastante limitante, no para pedalear pero sí muchísimo para nadar y algo para correr. Tuve luego un intervalo de una semana de descanso donde hice mucha fisioterapia pero fue todo muy estresante, ya que habían cambiado algunos criterios para la clasificación y, de estar adentro a comienzo de año, en una sola carrera podía quedar afuera.
Para la última fecha, en México, no sólo dependía de mí sino de la ecuatoriana que podía quedarse con la nueva bandera. Pero finalmente salió todo bien y a los dos días salió la lista actualizada donde vi mi nombre y respiré…”
Romina insiste en que su preparación para Tokio no fue la que hubiera querido, pero está orgullosa de haber estado entre las 33 que terminaron. Cruzó la meta, se recibió de olímpica.
“Mi conclusión es que para tener otra representación olímpica en un futuro tiene que haber un proyecto que perdure y que no se corte. Tiene que empezar con los juveniles y así como se entiende el reglamento de cualquier deporte, si no se entiende el sistema de clasificación ITU no se puede ni arrancar. Los metodólogos de alto rendimiento encargados tienen que saberlo, no es un deporte de tiempo y marca, es un ranking y no se puede lograr una clasificación con cinco carreras cuando tus contrincantes hacen 20. El triatlón es olímpico desde el año 2000 y hemos tenido solo cuatro representantes masculinos y dos femeninos.”
Con respecto a esta nueva etapa que se inicia con el apoyo de Cervelo, Romina nos cuenta que a partir de este año cuenta con una R5, una bici tope de gama de la marca.
“Es una tranquilidad saber que el material que tenés va a responder. Tuve un periodo de un mes en Cachi, donde pude testearla con varias horas de ciclismo a la semana y es de las bicis más rígidas que probé, sobre todo escalando.”